Avances técnicos

"Breve" artículo realizado para la asignatura de Historia Premoderna del Asia Oriental (2º curso)

Avances técnicos en la historia premoderna de China

En la historia de China el motor básico de crecimiento y progreso económico es el de la agricultura, por lo que muchos de los avances técnicos que se dan a lo largo de los años están relacionados o aplicados a ella.

Ya en el neolítico (aproximadamente a partir de 8000aC), época en la que la agricultura comienza a tener un papel destacado en comparación a la pesca, la caza o la recolección, las culturas predominantes de la época (Yangshao, Dawenkou...) utilizaban instrumentos de piedra, y se tiene constancia de la existencia de azadas, palas, cuchillos y manos de mortero fabricados con esa técnica. En los valles inferiores del Yangzi se tenía un nivel técnico similar pero utilizando hueso y madera en lugar de la piedra. En ambos casos, las culturas conocían la elaboración de la cerámica, algo que influirá a lo largo de los años en el desarrollo de China.

En la disnastía Xia se perfecciona el uso de los instrumentos líticos, de madera, de hueso y de concha, se introduce la talla del jade, la artesanía del bambú, el tejido de seda y cáñamo, una generalización del torno de alfarero con una cerámica cada vez más sofisticada. Además,las casas comienzan a edificarse a nivel del suelo en lugar de ser semisubterráneas y se introduce el que sería el cambio decisivo para pasar de la Prehistoria a la edad Antigua: el descubrimiento del bronce.

En la época de la dinastía Shang se empieza a utilizar una técnica de construcción que consiste en apisonar la tierra por capas sucesivas, y se emplea además para la edificación de murallas para fortificar las ciudades. Se comienza a desarrollar la escritura en forma de adivinaciones, se inventa el carro de caballos y se le da un papel predominante al uso del bronce a nivel religioso y económico: vasijas de bronce (fundidas, no forjadas) que se utilizarán en rituales y sacrificios y que concederán prestigio a las familias que las posean. También se utilizaba el bronce en los pilares de construcción junto a la piedra, piezas de carro y arneses y armas (en especial un hacha-puñal llamado ge). El rey controlaba la producción de bronce y, en muchas ocasiones, se regalaba a familias nobles, que controlaban la fuerza de trabajo de aquella época. Las transacciones comerciales de la época se hacían probablemente con cauri y seda.

A principios de los Zhou se practicaba un sistema de agricultura basado en los <<campos de pozos>>, en los que los campos se dividían en 9 parcelas, 8 de las cuales conreadas individualmente por las familias y una novena conreada de forma comunal, cuyos beneficios se entregaban en forma de tributo a la clase dominante. En el período Chunqiu se introdujo el uso del hierro, aunque en la agricultura todavía se utilizaba generalmente el bronce para fabricar los instrumentos de conreo. El comercio importante estaba reservado a productos de lujo del gusto de la nobleza de aquella época (que caía en decadencia progresivamente), como las perlas o el jade.

En los años de los Reinos Combatientes los avances tecnológicos se disparan gracias a las nuevas necesidades que generan las guerras entre estados, cada vez más distanciadas el uso de carros, caballos y armas de bronce típicas de las batallas entre la nobleza. Es en esta época que se toma conciencia de la importancia de la economía: la victoria la consigue aquel con más hombres, más recursos y más reservas de grano, por lo que el progreso de la agricultura es clave. El hierro se generaliza para la elaboración de productos agrícolas, así como para las armas, y de la misma manera que la cerámica y el bronce, se funde en lugar de ser forjado. También se empieza a experimentar con el acero, y se instaura un sistema de producción en cadena. En algunas zonas, como en la valle del río Wei o la Llanura Central, se empiezan a aplicar formas de agronomía muy elaborada, como la utilización de fertilizantes, el estudio de la adecuación de los suelos a los tipos de cultivo, las fechas de conreo, la roturación de las tierras... También se desecan la mayor parte de zonas pantanosas, se drenan las tierras salinizadas y se producen grandes obras de irrigación. Los carros de timón se sustituyen por las carretas de doble vara y los arneses, antes fijos al cuello de los caballos, paran a ser de tirante. Las ciudades pasan a ser centros comerciales, en los que se generaliza el comercio de tejidos, cereales, sal, metales, madera, cueros y pieles. Se generan además empresas artesanales privadas, como minas o fundiciones de hierro, y las flotas navales y las caravanas aportan una mejora de transporte aplicada al comercio. Con el progreso del comercio se generaliza el uso de la moneda, de la que se conocen cuatro tipos principales: el bu (azadones de hierro), el dao (con forma de cuchillo), el yibi (“narices de hormiga”, en forma de caurís) y una moneda de bronce con un cuadrado tallado en medio.

En la época de los Qin, se unifican las medidas de capacidad y longitud, los pesos, el eje de las ruedas, el estilo de escritura y la moneda (se impone la de cobre), cuya acuñación pasa a ser monopolio del Estado. Se construye una gran red de carreteras que parten de la capital y se fijó el ancho de los carros que podían circular por ellas. Esas medidas incentivaron al comercio, aunque no estaba visto con buenos ojos. En materia de construcción se edifica una Gran Muralla en la zona septentrional para evitar el avance de los xiongnu, y también se cavan varios canales entre los ríos para facilitar las expediciones militares. También se construye un camino de 800 kilómetros (zhidao) que une Xianyang con el desierto de Ordos, para aprovisionar a las tropas militares.

Con la llegada de los Han volverá a estabilizarse durante un período la economía del país, antes marcada por las continuas guerras. La economía agrícola se centra en cultivos intensivos que emplean técnicas de irrigación sofisticadas, se selecciona el tipo de semilla en función del suelo y del clima, se permite al campesinado quedarse con los excedentes la cosecha para comerciar y la artesanía doméstica pasa a tener un papel importante para incrementar los ingresos de una familia. Los instrumentos de hierro cada vez tienen más calidad y se generalizan los bueyes como animales de arado. A partir del 117aC se implanta un monopolio sobre el hierro y la sal, que duraría cerca de una centuria, y la administración crea cerca de 48 fundiciones de hierro que coexistieron con otras empresas públicas y privadas, como las de la seda. También se introducen nuevas semillas (como la uva) gracias a los viajes realizados por Zhang Qian, que alerta además de la potencia del comercio exterior como motor de crecimiento económico. La seda es de gran atractivo para los países vecinos, y pasa a ser moneda de cambio en las negociaciones diplomáticas del Estado, y se incrementa mucho su producción. La apertura comercial hacia el Asia del sureste produce la importación de vidrio, ámbar, ágata, cornalina y algunas semillas como el jazmín. Más adelante se comenzará a comerciar por la incipiente Ruta de la Seda.

Durante la usurpación de Wang Mang se introducen dos avances técnicos relevantes: el molino de agua, que se utilizaba principalmente en los fuelles de pistones de las fundiciones, y la carretilla, que permitía incrementar la fuerza individual de cada hombre mejorando así su producción. A nivel más económico prohibió la venta de las tierras y la concentró en el Estado, para incentivar la propiedad igualitaria de la tierra, obligó a los nobles a intercambiar su oro por dinero, y posteriormente devaluó la moneda. El Estado volvió a monopolizar el hierro y la sal, e incluyó el mercado del grano, de la tela y de la seda. Impuso nuevos impuestos a los comerciantes.

Por último, en la época de los Han orientales, se exageró todavía más la diferencia entre campesinos ricos y pobres, ya que estos últimos no podían permitirse las mejoras tecnológicas introducidas hasta la fecha, como el uso del hierro en las rejas del arado, animales de tracción, irrigación... y se propició la crisis. La construcción de carreteras y puentes se fue estancando y se le dio prioridad al recaudamiento de dinero de los campesinos en lugar de los servicios sociales obligatorios hasta la fecha. Como nota aparte, la venta de generalizada de cargos de funcionarios se introdujo en el mercado negro en lugar de ascender por criterios meritocráticos.

Gernet, Jacques. El mundo chino, Barcelona, Editorial Crítica, 1999.

J.A.G., Roberts. Historia de China, Valencia. Publicacions de la Universitat de València, 2008.